El Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT) acaba de publicar su último informe anual. Lo tenéis disponible aquí. Manteniendo la tendencia de los últimos años, España sigue liderando el consumo de cannabis y cocaína. Y no olvidemos que el alcohol no aparece incluido en los informes del OEDT.

Criticar cuanto se realiza en la atención y la prevención puede ser la decisión más fácil e inmediata, pero en absoluto la más acertada. Preguntémonos si realmente existe una política definida en materia de drogodependencias en este país –tanto a nivel central como autonómico-, más allá de documentos que, como los planes y estrategias autonómicos, no son desarrollados posteriormente.

Algo está fallando desde hace muchos años y poco tiene que ver con los cambios políticos. Basta con comprobar la ausencia casi generalizada del problema en los programas políticos, para ser conscientes del bajo nivel de interés que actualmente suscita este problema. El mal es endémico y exige una respuesta de los propios profesionales.